volver a empezar
“Sic tránsito gloria mundi”. Cuando era un mozalbete Vince formó parte de “Stereo Dream”, un grupo musical británico que pegó muy fuerte. Pero así como su compañero Austin pudo labrarse después de una carrera como solista, él ha ido dando tumbos sin demasiado éxito. Han pasado 20 años, y se diría que el sueño musical se ha esfumado, pues ni siquiera logra que le fichen para dar conciertos modestos en pubs londinenses. Pero cuando está tocando en la calle, improvisando con su teclado, un chaval joven que resulta ser autista, Stevie, empieza a acompañarle con sus baquetas de batería, produciendo una especie de conjunción planetaria. Un viandante lo graba con su móvil, y el vídeo se hace viral. Vince ve aquí la oportunidad de relanzar su carrera, pero Amber, sobreprotectora madre soltera de Stevie, teme que el chico se ilusione demasiado y quede herido si al final no tiene el éxito deseado.
Sentido película del desconocido eddie sternbergque adapta su corto homónimo de 2015, un poco al estilo de lo que hizo Damien Chazelle estafa Latigazo. No es la típica película sobre banda musical y búsqueda de la fama al uso, sino que con un asumido y adecuado aire de cinta independiente, nos muestra a un artista musical sin rumbo, para el que asoma una oportunidad inesperada para enderezar el rumbo, no solo profesional sino vitalmente. Pues en el pasado, cuando era un joven inexperto, tomó decisiones de las que se arrepiente, de modo que siempre le ha pesado la muerte de su hermano, y el distanciamiento de su madre. Ahora, al conocer a Stevie y Amber, es como si se presentaran ante él dilemas con un aire de “déjà vu”, que le invitan a usar su libertad para, esta vez, dejar la inclinación a satisfacer su propio egoísmo, y pensar por un momento en los otros.
La cinta tiene un aire fresco, donde contrasta el recorrido de Vince por los pubs con el aire profesional de conciertos de más envergadura y de los estudios de grabación. Y tienen encanto los pasajes en los locales parroquiales de una iglesia donde se imparten sesiones de musicoterapia, a las que se suma el protagonista, y donde descubre una empatía asombrosa con los asistentes y unas inesperadas cualidades pedagógicas. Los temas musicales del grupo que forman Vince y Stevie, los “Tin Men”, funcionan bien, y brilla con luz propia el clímax del cumpleaños del chaval autista. Lo hacen bien los actores, tanto el debutante leo largocomo los mas experimentados Ed Skrein y Leonor Matusura.