Esta noche volveremos a ver como una vez más la Reserva Federal (FED) se decide a subir los con Jerome Powell a la cabeza.
Esta es la primera que se produce después del descanso de agosto y sin duda alguna parece que puede ser incluso más fuerte esta subida de lo previsto. Esto se debe a los datos de inflación que conocimos el miércoles de la semana pasada donde si bien se contuvo la inflación, no llego a cumplir con las expectativas de los analistas (8,3% real vs 8,1% esperado).
En la inequívoca subida de tipos de interés que veremos hoy existe una gran posibilidad de que se suban 75 puntos básicos, aunque esta muy presente la subida de 100 puntos básicos debido a esos datos de inflación que no contentaron a los más “hawkish” de la Fed, recordemos que el BCE iba a subir hace tan solo dos semanas 50 puntos básicos y finalmente acabo subiendo 75 cuando vio que la cuestión inflacionaria no remitía.
A todo esto, hay que sumar varios puntos de fondo que se han dado este mes y que surgen tanto a Europa como a Estados Unidos ya sus respectivas divisas.
Hay que recordar que en este mes la Fed empezó con la reducción del balance más importante hasta la fecha, con una reducción de 95.000 millones al mes correspondientes 60.000 millones a bonos del tesoro y 35.000 a deuda de agencias y bonos ligados a hipotecas, esto sin duda tiene mucho que ver con la caída de las bolsas por la falta de apoyo y también con la apreciación que se ha dado del dólar durante todo este mes.
Por el lado europeo el día de ayer la presidenta del BCE, Christine Lagarde, volvió a hacer molestia en que la subida de tipos dependería de los datos de inflación, siendo esto otra vez más el mismo cuento de siempre que ya tienen acostumbrados a contar a los inversores y por lo tanto una vez más el euro vuelve a sufrir las consecuencias, unas consecuencias que se tornan catastróficas y que nos llevan al 0,99 en la apertura de la sesión de hoy.
Y en el telón de fondo sigue la guerra en Ucrania la cual no se espera que tenga un final ni pronto ni tranquilo, con el invierno acercándose cada vez más y más los analistas temen un estancamiento lo que sin duda no favorece a Europa. Además de esto hemos conocido estos días que Putin tenía la intención de anunciar un uso total en Ucrania presionando así más al país después de las retiradas que ha tenido que hacer durante estas semanas y esta misma mañana ha procedido a realizarlo.
Sin duda alguna tanto la perdida de seguridad por el conflicto ucraniano como un BCE que parece estar a otras cosas no favorecen especialmente al euro, y más teniendo en cuenta que esa falta en la seguridad del euro la recoge en gran medida el dólar. Con un mercado laboral mucho más preparado que el europeo y que puede acometer subidas de tipos de interés más rápidas y efectivas. Por lo tanto, no es descartable que para final de año volvamos a ver el 0.95 si todo sigue igual.