Luis Díaz fue titular, completando, otra vez, uno de los tridentes más temidos de Europa, con Sadio Mané y Mohamed Salah. Eso solo ya es una gesta.

Fue la apuesta de Jürgen Klopp en un partido definitivo, uno en el que solo uno de los competidores saldría vivo, y eso habla de la gran confianza que le tiene.

Era una nueva cita entre Manchester City y Liverpool, ahora por la semifinal de la FA Cup, y el colombiano estuvo presente, más como jugador de equipo que como el llamado a salir en las portadas. El triunfo 3-2 significa que cumplió su misión personal.

Estuvo en el segundo gol de Mané, en una tocata que arrancó por su costado y que fue abriéndose al polo opuesto hasta llegar al senegalés y su fantástica definición. Y por poco se apunta una nueva asistencia para Salah, sobre el final, cuando más encima estaba Manchester City, pero el egipcio no pudo definir con precisión.

En el resto del juego fue una amenaza constante, recibió durísimas faltas de Fernandinho y Cancelo y se encargó de tapar su punta, con mucho éxito especialmente en la primera etapa.

«Sorprendió a los fanáticos de los Reds con una exhibición de pies rápidos en el mediocampo y le dio a Cancelo un momento difícil. Tan incómodo para que City se las arreglara. Notable», dijo sobre su trabajo el diario Liverpool Echo, que le dio 8 puntos de calificación.

Lo superaron Mané, la figura del duelo con su doblete, y Thiago, de gran trabajo, ambos con 9 puntos. Incluso superó a Salah (7). Otro buen dia en la oficina para el guajiro. Felizmente, se ha vuelto habitual.